El segmento de las pick ups medianas es uno de los más importantes y de los que más creció en los últimos años, a nivel regional y especialmente en nuestro país. Como ya se sabe, en Argentina se fabrican tres de sus principales referentes (Toyota Hilux, Ford Ranger y Volkswagen Amarok, a las que próximamente se sumarán la Nissan Frontier, Renault Alaskan y Mercedes-Benz Clase X), que tomaron la posta de las ya antiguas pero veneradas camionetas full size, como la Ford F100, entre las preferencias del público, que al igual que en los SUV dejaron de darle un uso exclusivamente de trabajo, para utilizarlas también para viajes largos y en la rutina diaria, lo que hizo que su nivel de confort mejorara notablemente a niveles impensados décadas atrás.
Con multitud de marcas, modelos y orígenes (Argentina, Brasil, México y Tailandia), la Foton Tunland aparece como la primer alternativa china en ofrecerse en nuestro mercado, con una tímida presencia inicial pero con mucho por descubrir. No es una pick up enfocada más hacia el confort como se viene dando en muchos casos en el segmento, sino una al estilo más tradicional, para el que busca una herramienta de trabajo incansable y robusta como primer requisito, aunque también se permite algunas concesiones al confort de acuerdo a los tiempos que corren y que se han vuelto casi indispensables para el uso diario, como el aire acondicionado, levantavidrios eléctricos y un sistema multimedia moderno, para el entretenimiento a bordo.
La Tunland es la carta de presentación de Foton en Argentina, una marca desconocida aquí pero que desde hace varios años tiene fuerte presencia en otros países de la región como Chile, Perú y Uruguay, no sólo con pick ups sino también con una variada gama de camiones.
En nuestro mercado, la automotriz china está representada por una alianza entre el Grupo Belcastro(importadora de Alfa Romeo e Isuzu) y Ralitor (importador de DFM y JMC), que comercializa a la Tunland en tres versiones, 4×2 Standard (U$S 30.240), 4×4 Standard (U$S 31.740) y Luxury (U$S 33.280), que fue la que utilizamos en esta prueba. Antes de comenzar el análisis, vale aclarar que la unidad contaba con un ploteo que hace alusión a la participación de Foton en el Dakar, pero se trata sólo de una decoración estética, ya que tanto mecánicamente como en cuanto a equipamiento, era totalmente de fábrica, sin ningún tipo de modificación.
Diseño exterior:
Sin ser la más atractiva de la categoría, la Tunland llama la atención –no sólo por el ploteado del Dakar de la unidad que manejamos-, sino en gran parte por ser una novedad frente a las pick ups que estamos acostumbrados a ver a diario. Su estilo es típicamente asiático, pero la sorpresa es aún mayor al ver el logo en la parrilla, totalmente desconocido para la gran mayoría del público, que para saber de qué marca es y cómo se llama este modelo, tendrá que observar la tapa de la caja de carga.
El sector frontal se destaca por la enorme parrilla cromada, que dibuja una V que alberga en su centro el logo de Foton. También le aportan su toque personal al conjunto unos grandes faros redondeados, que aunque poseen lámparas halógenas, cuentan con proyector tipo lupa.
En la parte inferior del paragolpes se encuentra una toma de aire de tamaño considerable, que esconde debajo dos pares de ganchos para remolque. En los extremos, enmarcados por un plástico negro, se ubican los faros antiniebla delanteros. Como señalamos al principio, no cuenta con un estilo innovador ni viene a romper con lo establecido estéticamente hablando, pero sí consigue diferenciarse de la mayoría de las camionetas que se venden actualmente en nuestro mercado.
El perfil es quizás la vista menos personal de la Tunland, ya que tiene un aire similar a la Hilux de generación anterior, especialmente en el diseño de la cabina y la puerta trasera. Con líneas simples, sin demasiados detalles, en esta parte se destacan los abultados pasarruedas, las llantas de aleación de 17 pulgadas (calzadas con neumáticos Giti Savero HT Plus M+S en medida 265/65 R17) las branquias (simuladas), la carcasa cromada de los espejos, los estribos –muy útiles, ya que es bastante alta- y dos trazos rectos que empiezan en las puertas delanteras –uno a la altura de las manijas de las puertas y otro más abajo-, que recorren todo el lateral de la pick up hasta finalizar en su ángulo más llamativo, el remate trasero.
Allí, las luces de formato triangular se extienden hasta buena parte del lateral de la caja de carga y están algo embutidas en su interior, lo que termina dibujando una suerte de spoiler tipo cola de pato en la parte superior de la caja. Este es sin dudas, y contrario a lo que pasa de perfil, su rasgo de diseño más personal y distintivo. Además, posee luces antiniebla traseras, ubicadas en el paragolpes.
En cuanto a dimensiones, la Foton mide 5.310 mm de largo, 1.880 mm de ancho, 1.860 mm de alto y 3.105 mm de distancia entre ejes. Por su parte, la caja de carga posee 1.580 mm de largo, 1.600 mm de ancho –que se reduce a 1.100 mm en los pasarruedas-, 460 mm de profundidad y soporta hasta 1.025 kg. Para destacar, cuenta de serie con una pintura en epoxi que le brinda protección ante rayones. Además, tiene ganchos de sujeción para la carga. Su tapa es algo pesada y da una buena sensación de robustez en caso que se necesite transportar algo sobre ella. Como faltantes, notamos la ausencia de iluminación en este sector y de una cerradura que permita trabar la tapa (según nos aclararon desde la marca, están estudiando incorporarla próximamente).
Debajo del área de carga se encuentra alojada la rueda de auxilio, de igual medida que las titulares y con llanta de aleación, excelente.
Diseño interior:
Además de su conjunto mecánico –del que hablaremos más adelante-, una de las cosas que más curiosidad nos daba al momento de conocer esta Tunland era cómo estaría resuelto su interior, uno de los puntos que suelen generar dudas en los vehículos importados de China. Grata fue la sorpresa al subirnos a esta pick up y encontrarnos con un habitáculo de diseño agradable y con una muy correcta calidad de materiales.
Esta es la primer actualización que recibió la Foton desde su lanzamiento mundial (el diseño anterior del tablero era bastante más simple), coincidiendo con su arribo a nuestro país. Las principales mejoras se dieron en cuanto a tecnología y confort, por lo que incorporó un nuevo sistema multimedia con pantalla táctil de 7 pulgadas.
Estéticamente luce bastante moderno, con salidas de aire rectangulares con marco cromado, la pantalla mencionada anteriormente y una interesante dotación de equipamiento, que incluye entre otras cosas, climatizador automático de una zona. Como particularidad, se destacan los apliques símil fibra de carbono en el sector inferior de la consola central y alrededor de la palanca de cambios. El color del tapizado y los revestimientos es de un tono gris grafito, como en algunas pick ups japonesas de fines de los 90.
Sólo desentonan un poco la apariencia y calidad de algunas perillas (como la del control del volumen del equipo de audio, que recuerda a la de algunos electrodomésticos chinos, con una terminación cromada muy artificial), así como el tacto de algunos plásticos de la plancha frontal, algo ásperos.
Las terminaciones y encastres reflejan un buen esmero en su ensamblado, por lo que no notamos ruidos a piezas sueltas ni los grillitos que suelen aparecer al circular por empedrados o terrenos desparejos.
Pasando a la habitabilidad, considerando a un automovilista de 1,75 mts, dispone de 12 cm libre de altura al techo en la posición más baja de la butaca y 6 cm en la más alta. En las plazas traseras un pasajero de 1,75 mts ubicado detrás del conductor, tendrá 8 cm desde sus rodillas al respaldo de las plazas delanteras y 10 cm al techo.
Instrumental:
Compuesto por dos esferas más grandes, para el velocímetro y tacómetro, y dos más chicas para el indicador de combustible y temperatura del refrigerante, el instrumental de esta pick up es claro y legible, con un fondo celeste que realza su apariencia.
Según nuestras mediciones, el error promedio del velocímetro fue del 4,85%, probado en 4 ocasiones con una distorsión exacta de 5 km/h: a 80 km/h de aguja, son 75 km/h reales; a 100 km/h, son verdaderos 95 km/h; a 120 km/h, 115 km/h reales y a 130 km/h, son exactos 125 km/h.
Entre medio de los indicadores analógicos está el pequeño display de la computadora de a bordo. La información que brinda es algo escasa, sólo los consumos, y además, se opera mediante un botón –al igual que el limitador de velocidad- ubicado fuera del instrumental, en una posición un tanto oculta a la vista del conductor, detrás del brazo que comanda el cambio de luces.
Equipamiento:
La dotación de confort de esta opción Luxury es correcta para su precio, sin lujos pero bastante más completa que las versiones básicas de sus competidoras en precio. Ofrece dirección asistida, climatizador automático (unizona), control de velocidad crucero, bloqueo central de puertas con comando a distancia, llantas de aleación de 17”, volante multifunción forrado en símil cuero y tapizado de símil cuero con la parte central microperforada, espejo interior antiencandilamiento, faros regulables en altura desde el interior, levantavidrios eléctricos delanteros y traseros, el sistema multimedia ya mencionado en el ítem anterior de 7 pulgadas con lector de CD/MP3/USB/Aux y bluetooth. Puede agregar navegador y cámara de marcha atrás, dos elementos que la marca ofrece como opcional.
Las variantes Standard (más accesibles), sólo pierden el control de velocidad crucero, el equipo de audio (poseen uno menos completo) y el tapizado de ecocuero contando con un tapizado textil sintético de muy buen aspecto.
Seguridad:
En el apartado de seguridad, el equipamiento del que dispone la Tunland lo podemos considerar correcto: posee lo indispensable como doble airbag, frenos con ABS/EBD, anclajes ISOFIX y control de tracción y estabilidad y agrega un ítem que sólo comparte con la Amarok V6, frenos a disco ventilados en las cuatro ruedas. Hasta el momento son las únicas dos pick ups que disponen de discos también en el tren trasero, lo que sin dudas mejora su performance en detenciones como lo veremos en el siguiente rubro.
En contraste, para estar a la altura de la mayoría de sus competidoras, debería incorporar más airbags y por qué no, alguna ayuda más a la conducción como control de balanceo de tráiler. Aunque la crítica principal se la lleva la plaza central trasera, que no dispone de apoyacabezas y el cinturón es del tipo abdominal.
Motor, transmisión y comportamiento:
Como ya dijimos, uno de los desafíos a los que deberá enfrentarse Foton con su producto es a los habituales prejuicios que hay en cuanto a su procedencia, que generalmente cuestionan su durabilidad. Para ello, la firma asiática recurrió a una fórmula muy convincente, hasta para los más escépticos: el punto más importante e interesante de la Tunland es el conjunto mecánico en su totalidad, que en lugar de ser un desarrollo propio, se eligió a proveedores de renombre mundial –y todas con representación en Argentina- para los componentes más importantes de la pick up.
Para empezar, el motor es un Cummins ISF de 2.8 litros, que desarrolla 170 CV de potencia a 3.600 rpm y 360 Nm de torque desde las 1.800 vueltas. Está homologado bajo la normativa de emisiones Euro V, por lo que cuenta con filtro de partículas. Aquí es bueno aclarar dos cuestiones importantes: la primera es que requiere sí o sí la utilización de diésel Premium o euro para no dañar el DPF y la segunda, a la izquierda del conductor, cerca de la columna de dirección, se encuentra un botón para regenerar dicho filtro, una tarea importantísima a la que los usuarios de todos los nuevos motores que se rigen bajo esta normativa deberán acostumbrarse.
Junto al propulsor trabaja una caja de cambios manual de 5 marchas fabricada por Getrag –precisa y de recorridos bastante cortos-, mientras que el sistema de doble tracción –con reductora- está firmado por Borg Warner y cuenta con ejes Dana… un combo que promete y que como veremos, realmente está a la altura de las expectativas.
Para empezar, al encender el motor y acelerarlo, emana de él un agradable sonido, un ronroneo que da cuenta de su poder y se le suma el agradable soplido del turbo. Aún así, el funcionamiento del propulsor es bastante silencioso, ayudado en gran medida por la cuidada insonorización del habitáculo, con varios sectores con material aislante. También las puertas cuentan con doble burlete, que no permiten la filtración del ruido del viento y los neumáticos, que no se perciba el habitual sonido de rodadura en asfalto como en otros vehículos equipados con este tipo de cubiertas.
La comunión entre el Cummins y la caja Aisin es realmente muy buena, pudiendo aprovechar en todo momento la potencia del motor, aunque su mejor zona de aprovechamiento se encuentra por encima de las 1.500 rpm. Volvemos a insistir, se nota que es un conjunto preparado para enfrentar cualquier exigencia.
En términos de consumo obtuvo valores un poco por encima de sus competidores, en nuestras pruebas a velocidad real acusó un consumo en ruta de 11,6 l/100km, circulando a 130 km/h (a un régimen de 2.600 rpm), descendiendo a 10,5 l/100km yendo a 120 km/h (con el impulsor girando a 2.400 vueltas) y a 8,3 l/100km circulando a un ritmo tranquilo de 100 km/h (a un régimen de 2.000 rpm). A esta velocidad, es posible recorrer algo más de 900 kilómetros sin parar a repostar, una autonomía que no es de las mejores del segmento, ya que la mayoría de sus rivales logran bastante más de 1.000 km con un tanque, inclusive la Volkswagen Amarok V6. En ese sentido el tanque de combustible de 75 litros de la Foton es más chico en comparación con los 80 litros que permiten cargar las otras pick ups. Asimismo, en el ámbito urbano, la cifra alcanza los 11,8 l/100 km, valores un poco altos, que mejorarían con la incorporación de una sexta marcha y un tanque con unos litros más de capacidad para aumentar su autonomía.
En contrapartida, las prestaciones que ofrece este Cummins ISF son buenas: acelera de 0 a 100 km/h en 12,11 segundos –en las dos primeras marchas, el motor no pasa de las 3.800 rpm-, alcanza una velocidad máxima de 160 km/h (limitada) y logra una correcta elasticidad, demorando 11,06 segundos para pasar de 80 a 120 km/h en 4ta velocidad o 16,81 segundos en 5ta marcha.
La dirección es de asistencia hidráulica, pero no ofrece complicaciones a la hora de estacionar o realizando maniobras en espacios reducidos. Es cómoda en ciudad y lo suficientemente firme en ruta como para brindarnos una buena sensación de seguridad.
Las suspensiones son del tipo Mc Pherson adelante y de eje rígido con ballestas atrás. En ciudad y circulando sin carga hay que decir que son un poco rebotadoras como sucede en muchas pick ups, pero no comprometen la comodidad de viaje, mucho menos en autopista si el asfalto es parejo. Así, tranquilamente se pueden recorrer grandes distancias sin cansarse. Un detalle a mejorar es que a altas velocidades, los espejos –no la carcasa- empiezan a vibrar.
Claro que una pick up no va a utilizarse todo el tiempo sobre el pavimento, más una de este tipo, orientada más hacia el trabajo, por lo que intuimos que la mayoría de sus usuarios la emplearán en tareas rurales, por lo que decidimos probarla también en caminos accidentados, de tierra, en los que los pozos, saltos y huellones son parte del escenario común sobre el que debería transitar un hipotético dueño de la Tundland diariamente. Ante las diversas exigencias a las que la sometimos, la suspensión de la Foton respondió a la altura de las circunstancias, manteniendo siempre una gran sensación de robustez y sin perder la línea en ningún momento.
Otro aspecto clave al momento del off road y que sin dudas aporta una mayor tranquilidad es que todos los bajos de la camioneta están protegidos. Adelante cuenta con un chapón que cubre el motor, el cárter y la transmisión. También las diversas cañerías, el cardan y el escape están en una posición elevada, lo que los resguarda de golpes o piedras que pudieran atentar contra su integridad. Llamativamente, el único elemento descubierto es la caja de transferencia, que no cuenta con ninguna protección, inclusive de los conectores eléctricos. Por ora parte dispone de un buen despeje al piso, siendo éste de 22 cm.
Justamente, hablando de la caja de transferencia, la tracción 4×4 se acopla mediante una perilla giratoria ubicada al lado de la palanca de cambios y cuenta con tres posiciones, 4×2 (tracción trasera) y 4×4 High (alta) y Low (baja), pudiéndose conectar el sistema 4×4 H circulando hasta 70 km p/h. Debido a que durante los días que realizamos el test no había llovido, era muy difícil encontrar barro lo suficientemente espeso como para probar la baja, por lo que cualquier obstáculo o dificultad que encontramos en el camino la superamos tranquilamente utilizando la tracción simple o la doble en alta.
Por último, resta hablar del comportamiento a la hora de frenar, un rubro donde la Tunland se destaca, en gran parte gracias a sus cuatro discos de freno ventilados. Para detenerse completamente de 100 km/h a 0 necesitó sólo 38,6 metros, una muy buena marca para un vehículo de su porte. Como salvedad, hay que decir que el recorrido del pedal de freno puede parecer un poco largo al principio, pero es simplemente una cuestión de costumbre a tener en cuenta la primera vez que manejamos esta pick up.
Pero fuimos un poco más allá y también realizamos una prueba de esquive, una maniobra bastante riesgosa en una pick up dado su alto despeje y centro de gravedad alto. El resultado fue muy bueno, la Foton mantuvo en todo momento la estabilidad (ayudada obviamente por el ESP), sin reacciones imprevistas ni una gran inclinación de la carrocería como podía esperarse. Aplausos para la puesta a punto del chasis, las suspensiones y la electrónica.
Precio:
Como señalamos al principio, esta Foton Tunland Luxury 4×4 que probamos cuesta U$S 33.280, lo que, al día de hoy equivale a $573.348. Para ver cómo queda posicionada en el segmento –por precio-, podemos compararla con la Ford Ranger XL 4×4 (2.2 TDCi 150 CV MT6 a $639.700), la Toyota Hilux DX 4×4 (2.4 TDI 150 CV MT6 a $655.000), Chevrolet S10 LS 4×4 (2.8 Duramax 200 CV MT6 a $627.800), Volkswagen Amarok Trendline 4Motion (2.0 TDI 140 CV MT6 a $641.400), Nissan Frontier XE 4×4 (2.3 TDI 190 CV MT6 a $687.600) y Mitsubishi L200 GLS 4×4 (3.2 MT5 a U$S 37.200). Obviamente, al tratarse de la versión más completa de la Tunland, su dotación de equipamiento supera ampliamente a la de sus rivales, ya que tomamos en cuenta su equivalente en precio, no en posicionamiento de gama.
En cambio, si consideramos que la versión Luxury es la top of the line, se distancia notablemente (en precio y en equipamiento) de la Ford Ranger Limited 4×4 (3.2 TDCi 200 CV MT6 a $ 862.000), Toyota Hilux SRX 4×4 (2.8 TDI 177 CV MT6 a $877.800, Volkswagen Amarok Highline 4Motion (2.0 TDI 180 CV MT6 a $851.100), Chevrolet S10 High Country 4×4 (2.8 Duramax MT6 200 CV MT6 a $791.200), Nissan Frontier LE 4×4 (2.3 TDI 190 CV MT6 a $771.800) y Mitsubishi L200 DI-D (U$S 51.900), por lo que se podría decir que hoy por hoy la pick up de la marca china no tiene una rival directa que compita con su misma relación precio-equipamiento.
Como conclusión, la Tunland resulta una excelente carta de presentación para Foton en el país, con un conjunto mecánico sólido y de probada confiabilidad que demuestra la correcta armonía entre todos sus componentes, con un equipamiento de confort y seguridad promedio en el segmento y algunos pocos aspectos a mejorar. El mayor desafío que deberá enfrentar esta pick up no tiene que ver con ella misma sino con la marca, para que logre un reconocimiento entre el público y es algo en lo que Foton está trabajando, como su promoción en el Dakar, y una pequeña aunque creciente red de concesionarios. ¿Es un producto recomendable? Sí, es un vehículo que difícilmente defraudará a sus compradores, una vez que dejen de lado los prejuicios sobre su origen. Si fuese una apuesta, definitivamente pondríamos unas fichas en la Tunland.
A continuación detallamos el cuadro con prestaciones y consumos:
Valores obtenidos con nuestro equipo de medición de performance |
Aceleración |
0 a 100 km/h |
12,11 seg |
207,80 m |
0 a 100 m |
7,84 seg |
77,59 km/h |
0 a 200 m |
11,85 seg |
98,90 km/h |
0 a 300 m |
15,21 seg |
116,26 km/h |
0 a 400 m |
18,25 seg |
123,18 km/h |
0 a 1000 m |
34,59 seg |
159,56 km/h |
Consumo |
Velocidad |
Régimen motor |
Consumo |
Autonomía |
a 100 km/h |
2.000 RPM |
8,3 l/100km |
903 km |
a 120 km/h |
2.400 RPM |
10,5 l/100km |
714 km |
a 130 km/h |
2.600 RPM |
11,6 l/100km |
646 km |
Urbano |
|
11,8 l/100km |
635 km |
Recuperación de 80 km/h a 120 km/h
|
En 4ta velocidad |
11,06 seg |
En 5ta velocidad |
16,81 seg |
|
|
|
|
Motor confiable y potente |
Consumos |
Mecánica robusta |
Falta 6ta marcha |
Insonorización |
Faltantes de 5to apoyacabezas y 5to cinturon inercial |
Comportamiento dinámico |
Red de concesionarias acotada |
Poder frenante |
|
Características Pick Up Foton Tunland 4×4 Luxury
|
Motor |
Diesel 4 cilindros |
Cilindrada en cm3 |
2.776 |
Potencia CV/rpm |
171/3.600 |
Par máximo kgm/rpm |
36,7/1.800 |
Velocidad máxima km/h |
160 |
Peso en kg |
1.950 |
Capacidad tanque de combustible en litros |
75 |
Capacidad de Carga kg |
1.025 |
Neumáticos |
265/65 R17 |
Consumo a 100 km/h |
8,3 litros/100 km |
Consumo a 130 km/h |
11,6 litros/100 km |
Consumo urbano |
11,8 litros/100 km |
Precio en dólares |
33.800 |
Garantía |
3 años o 100.000 km |
Fuente: 16 valvulas.com