Esta es la versión híbrida enchufable del BMW X1, un SUV de 4,48 metros de longitud. Su sistema de propulsión está compuesto por un motor de gasolina y uno eléctrico, que dan una potencia máxima conjunta de 220 CV. Tiene una batería de 9,7 kWh con la que puede circular «hasta 50 km» en modo eléctrico (WLTP) y que resta 55 litros al volumen de carga del maletero. A este modelo le corresponde el distintivo ambiental «0 Azul» de la DGT, el mismo que portan los vehículos eléctricos.

El motor de gasolina tiene tres cilindros, un turbo de doble entrada (Twin Scroll o, en la terminología de BMW, TwinPower Turbo), 1,5 litros de cilindrada y produce una potencia máxima de 125 CV. Está colocado en el frontal y transfiere su potencia a las ruedas de este eje a través de una caja de cambios automática de convertidor de par y seis relaciones.

El motor eléctrico produce 95 CV, está colocado sobre el eje posterior y mueve las ruedas traseras por medio de una trasmisión con una relación fija. Junto a él está la batería de iones de litio de la que recibe la electricidad, que tiene una capacidad bruta de 9,7 kWh. La toma de carga está ubicada justo delante de la puerta del conductor (detrás de la tapa que se ve en esta imagen) y BMW dice que con un cargador i Wallbox (no especifica la potencia), el tiempo de recarga es de menos de 3,6 horas.

La batería no resta espacio al habitáculo, pero sí al maletero, que tiene 450 litros en vez de los 505 litros de los X1 con un motor Diesel o de gasolina. Lo que no pierde es la posibilidad de abatir los respaldos posteriores en tres partes independientes.

Foto de - bmw x1 2019

Con los dos motores en funcionamiento, el X1 xDrive25e puede acelerar de 0 a 100 km/h en 7,0 segundos, por lo tanto, es más rápido que la versión xDrive20i Aut. de 192 CV (7,4 s) y más lento que la xDrive25i Aut. de 231 CV (6,5 s). Su velocidad máxima es 192 km/h, prácticamente la misma que la del X1 sDrive16d de 116 CV (190 km/h).

En estos momentos, el único SUV híbrido enchufable de tamaño comparable al del X1 es el Volvo XC40 T5 TwEn. El Volvo tiene una potencia máxima total de 252 CV (motor de gasolina de tres cilindros, 1,5 litros y 180 CV; motor eléctrico de 82 CV), una batería de 10,7 kWh (brutos) y una autonomía eléctrica de hasta 46 km (también tiene el distintivo «0 Azul»). Acelera de 0 a 100 km/h en 7,3 segundos y alcanza 205 km/h de velocidad punta. Su maletero es de 460 litros, 10 más que el del BMW. Está en venta por 45 150 euros (todavía no hay precios para el BMW). Ficha técnica comparativa.

Para conducir únicamente con el motor eléctrico hay que activar el modo de funcionamiento MAX eDRIVE (se activa pulsando el botón eDRIVE que hay junto a la palanca del cambio, imagen). Con él, la velocidad máxima del X1 xDrive25e es 135 km/h. Cuando se circula por debajo de 30 km/h en modo eléctrico, el coche emite un zumbido hacia el exterior para alertar a los peatones de su presencia. BMW dice que el sonido de este zumbido ha sido diseñado específicamente para los BMW eléctricos y que no perturba el confort acústico de los ocupantes.

Foto de - bmw x1 2019

Por defecto al arrancar, se activa el modo AUTO eDRIVE, con el que el coche gestiona la energía que necesita de cada uno de los dos motores para que la conducción sea lo más eficiente posible. Si hay una ruta activa en el navegador, datos como el perfil de elevación y el tipo de vías son considerados para optimizar el consumo de energía.

Hay un tercer modo llamado SAVE BATTERY que sirve para mantener el estado de carga de la batería en un nivel determinado o incrementarlo (mediante recuperación en las deceleraciones), con la idea de reservarla para un uso posterior, por ejemplo, en ciudad.

Además de los tres modos de gestión del sistema de propulsión, están los habituales modos de conducción de BMW: ECO PRO, COMFORT y SPORT. Estos también modifican la respuesta de los motores y de otros componentes como la suspensión, la dirección, el programador de velocidad y el climatizador.

Fuente: Km77.com